VAMOS , ¡ DATE PRISA¡
Vivimos una vida muy apretada, de "obligaciones", idas y venidas a extraescolares, compra, trabajos, médicos, notificaciones electrónicas.....Queremos llegar a toda nuestra apretada agenda.
Sin embargo, el ritmo de nuestros hijos no es el mismo.
A ellos les encanta disfrutar de cada momento que están viviendo, mientras que nosotros estamos deseando tachar el siguiente punto de nuestra agenda.
No les permitimos muchas veces desarrollar su autonomía , justo por este motivo, por las prisas.
- Les vestimos nosotros por ir más rápido, cuando ellos son capaces perfectamente de ponerse aunque sea los pantalones.
- No les dejamos que nos ayuden en la cocina, ni a batir los huevos, cuando están deseando cooperar.
- Incluso cuando estamos dando un paseo y quieren pararse a oler una flor o seguir el caminito de una hormiga.....nuestra contestación es siempre la misma: " Venga,no hay tiempo" , "Vamos", "Ahora no".
Las palabras que más utilizamos con nuestros hijos son:
- "Date prisa, vamos a llegar tarde "
- "Vamos , cómete el desayuno"
- "Vístete, corre, no nos va a dar tiempo.
- "Corre, lávate los dientes"
- "¡Queréis terminar de cenar! Hay que irse a la cama.
Aunque estas palabras no aumentan la velocidad de los niños, las seguimos diciendo una y otra vez. De hecho, las respuestas que obtenemos suelen ser del tipo:"Espera" , "Ahora voy", "Un momentito"........y, claro, entramos en cólera.
Pues bien, somos nosotros los que decidimos este tipo de vida, por supuesto. Elegir entre ir pasando al siguiente punto de nuestra agenda a toda prisa o vivir el momento, disfrutando de todos los placeres que nos regala el día.
Si elegimos la opción de comenzar a disfrutar de cada momento presente, nos daremos cuenta del gran regalo que nos ofrece la vida con cada momento, con cada minuto y con cada experiencia que vamos a ser capaces de descubrir al observar de verdad detalles como : las manitas de nuestros hijos, las expresiones de sus ojos al hablar , la forma con la que se relacionan con el resto del mundo exterior, esas conversaciones tan interesantes que son capaces de ofrecernos....
Y, quizás algún día nos pregunten: " Mamá, ¿ tengo que darme prisa para comerme el helado?"......
Reflexionemos un poco acerca de lo que provocamos en ellos.
Esta nueva forma de vida requiere su tiempo y maestría.
De lo que estamos seguros es de que se consiguen muy gratas recompensas.
Las cosas son más dulces y el amor llega con más facilidad cuando dejamos de correr por la vida.
Si decimos "No tengo tiempo para ésto", estaré queriendo decir: "No tengo tiempo de vivir".
Hagamos una pausa para deleitarnos de los placeres simples de la vida; es la única manera de VIVIR de verdad.
